Las metodologías ágiles son un enfoque para el desarrollo de software centrado en las personas y en los resultados. Se enfocan en la planificación adaptativa, la autoorganización y los plazos de entrega cortos. Son flexibles, rápidas y apuntan a mejoras continuas en la calidad, utilizando herramientas como Scrum y eXtreme Programming.
¿Qué son las metodologías ágiles? ¿Cómo funcionan?
Las metodologías ágiles funcionan admitiendo primero que el antiguo método de desarrollo de software en «cascada» deja mucho que desear. El proceso de «planificar, diseñar, construir, probar, entregar» funciona bien para fabricar automóviles o edificios, pero no tan bien para crear sistemas de software.
En un entorno empresarial donde el hardware, la demanda y la competencia son variables que cambian rápidamente, el trabajo ágil camina por la delgada línea entre demasiado proceso y poco.
Descripción general de la metodología ágil
La metodología ágil abandona el riesgo de pasar meses o años en un proceso que finalmente falla debido a algún pequeño error en una fase inicial. En cambio, se basa en confiar en que los empleados y los equipos trabajarán directamente con los clientes para comprender los objetivos y brindar soluciones de manera rápida e incremental.
Más rápido, más pequeño. El desarrollo de software tradicional se basaba en fases como la descripción de los requisitos, la planificación, el diseño, la construcción, las pruebas y la entrega. La metodología ágil, por el contrario, busca implementar el primer incremento en un par de semanas y todo el software en un par de meses:
Comunicación. Los equipos ágiles dentro de la empresa trabajan juntos a diario en cada etapa del proyecto a través de reuniones cara a cara. Esta colaboración y comunicación garantizan que el proceso se mantenga en marcha incluso cuando las condiciones cambian.
Realimentación. En lugar de esperar hasta la fase de entrega para medir el éxito, los equipos que aprovechan la metodología Agile realizan un seguimiento del éxito y la velocidad del proceso de desarrollo con regularidad. La velocidad se mide después de la entrega de cada incremento.
Confianza. Los equipos y empleados ágiles se autoorganizan. En lugar de seguir un manifiesto de reglas de la administración destinadas a producir el resultado deseado, comprenden las metas y crean su propio camino para alcanzarlas.
Ajustar. Los participantes sintonizan y ajustan el proceso continuamente, siguiendo el principio KIS o Keep It Simple.
Ejemplos de metodología ágil
Los ejemplos más populares y comunes son Scrum, eXtreme Programming (XP), Feature Driven Development (FDD), Dynamic Systems Development Method (DSDM), Adaptive Software Development (ASD), Crystal y Lean Software Development (LSD). Los equipos generalmente eligen uno o dos métodos. Las metodologías más utilizadas son Scrum y XP, que encajan muy bien.
Scrum es un sistema práctico que consta de sencillos pasos y componentes entrelazados:
- El propietario de un producto crea una lista de deseos priorizada conocida como cartera de productos.
- El equipo de scrum toma una pequeña parte de la parte superior de la lista de deseos llamada backlog de sprint y planea implementarla.
- El equipo completa su tarea pendiente de sprint en un sprint (un período de 2-4 semanas). Evalúan el progreso en una reunión llamada scrum diario.
- El ScrumMaster mantiene al equipo enfocado en la meta.
- Al final del sprint, el trabajo está listo para enviarse o mostrarse. El equipo cierra el sprint con una revisión y luego comienza un nuevo sprint.
A continuación, se muestra un ejemplo de cómo funciona Scrum: Bill se reúne con un cliente para discutir las necesidades de su empresa. Esas necesidades son la acumulación de productos.
Bill elige las tareas más importantes en las que trabajar en las próximas dos semanas. Su equipo se reúne en un scrum diario para concentrarse en el trabajo del día siguiente y abordar los obstáculos.
Al final del sprint, Bill entrega el trabajo, revisa el trabajo pendiente y establece el objetivo para el siguiente sprint. El ciclo se repite hasta que se completa el software.
A menudo utilizado con scrum, XP es un ejemplo de cómo Agile puede aumentar la satisfacción del cliente. En lugar de entregar todo lo que el cliente podría desear en un futuro lejano, les brinda lo que necesitan ahora, rápidamente. XP se centra en lanzamientos frecuentes y ciclos de desarrollo cortos. Utiliza revisión de código, programación de pares, pruebas unitarias y comunicación frecuente con el cliente.
A continuación, se muestra un ejemplo de cómo funciona XP: Bill crea una lista de los requisitos del cliente haciendo que el cliente cuente «historias de usuario» que describan las funciones. A partir de ellos, crea un plan de lanzamiento de software. El software se entregará en iteraciones, y se entregará una cada dos semanas.
El equipo trabaja en parejas de programadores, utilizando reuniones diarias para suavizar los obstáculos. El cliente proporciona comentarios en forma de más historias de usuarios. El ciclo se repite hasta que se entrega el software.
Qué son las metodologías ágiles: beneficios de la metodología ágil
Los beneficios de Agile están directamente relacionados con su mentalidad más rápida, liviana y comprometida. El proceso, en pocas palabras, entrega lo que el cliente quiere, cuando el cliente lo quiere. Se invierte mucho menos tiempo en desarrollar en la dirección incorrecta y todo el sistema responde más rápido a los cambios. Para obtener una lista más completa de beneficios, consulte esta publicación.
Más rápido. La velocidad es uno de los mayores beneficios de la metodología ágil. Un ciclo de vida de desarrollo de software más rápido significa menos tiempo entre pagar y recibir el pago. Eso, a su vez, significa un negocio más rentable.
Mayor satisfacción del cliente. Con Agile, los clientes no esperan meses o años, solo para obtener exactamente lo que no querían. En cambio, obtienen iteraciones de algo muy cercano a lo que quieren, muy rápido. El sistema se ajusta rápidamente para refinar la solución exitosa del cliente, adaptándose a los cambios en el entorno general.
Valora a los empleados. Los empleados cuyas ideas se valoran son mucho más productivos que aquellos a quienes se les ordena seguir un conjunto de reglas. La metodología ágil respeta a los empleados dándoles la meta y luego confiando en que la alcanzarán. Dado que ellos son los que tienen las manos en los controles y los que ven los obstáculos que surgen todos los días, los empleados están en la mejor posición para responder a los desafíos y alcanzar los objetivos en cuestión.
Elimina el retrabajo. Al involucrar al cliente en más que solo las fases de requisitos y entrega, el proyecto permanece en la tarea y en sintonía con las necesidades del cliente en cada paso. Esto significa menos retroceso y menos tiempo de «arriesgarse» entre el momento en que hacemos el trabajo y el momento en que el cliente sugiere revisiones.
¡Enhorabuena, ya sabes qué son las metodologías ágiles!