Es sabido que una imagen corporativa bien trabajada, ayuda a la fidelización de los usuarios, así como al incremento de la popularidad de la marca. La importancia de cuidar la imagen corporativa se incrementa conforme pasa el tiempo, puesto que son cada vez más empresas que compiten en un mercado limitado.
Asimismo, la innovación da lugar a que las empresas apuesten por productos mucho más transgresores y disruptivos, de ahí que los conformismos y la pasividad empresarial no son para nada aliados en este contexto.
Una imagen corporativa trabajada ayuda a la fidelización de los usuarios
La importancia del excelente diseño de la imagen corporativa se vuelve indispensable en un entorno altamente competitivo, donde la creación de empresas tiene lugar a un ritmo vertiginoso y donde los consumidores son, más que nunca, auténticos profesionales, donde la comparativa, la investigación y la perfección son el pilar sobre el que gira todo.
La imagen corporativa resulta el reflejo de cómo es una organización, su personalidad, comprende una serie de valores y emociones con los que el cliente se siente identificado.
Actualmente, las empresas no apuestan únicamente por vender un producto. Las organizaciones van mucho más allá, ofreciendo a sus clientes auténticas experiencias, difíciles de olvidar, logrando así el marketing boca a boca, el hacerse imprescindibles y, sobre todo, marcas cuyo consumo sea un orgullo.
Mediante la imagen corporativa, las empresas pretenden que su público objetivo se sienta identificado con la filosofía y valores de las diferentes compañías. De esta forma, el porciento de fidelización crece exponencialmente, al estar la marca al tanto de las necesidades y expectativas de sus consumidores.
Una buena imagen corporativa dota de coherencia visual a la marca, tanto a nivel gráfico como de comportamiento y comunicación. Asimismo, incrementa el valor de los productos o servicios ofrecidos por la marca. Una organización preocupada por su imagen, es una empresa que cuida los detalles y, por tanto, una empresa confiable y que se preocupa por el usuario.
La importancia de la imagen corporativa también es resultado de que una compañía se fortalezca y dé seguridad y confianza al usuario. Es relevante ofrecer una gran sensación de profesionalidad, que al final es lo que todos buscamos en los productos que adquirimos. Hay que generar orgullo de pertenencia a una marca con unos valores y objetivos muy marcados y destacables.
Por otro lado, cada vez son más las compañías que organizan eventos corporativos para perseguir distintos objetivos: presentaciones de productos, convenciones, congresos, formación del personal, incentivos, etc.
Es esencial conocer las características de cada evento, así como las herramientas necesarias para su correcta organización. Uno de los aspectos cardinales para el éxito organizativo lo compone el protocolo.
Este se basa en la creación de aquellas condiciones necesarias para que todo evento sea seguro, transcurra en orden, gestione correctamente a sus invitados y al anfitrión y cumpla con sus objetivos. Esta tipología de eventos marca diferentes medidas de protocolo a seguir según el acto organizado, aunque existen una serie de consideraciones comunes para todos.
¿Dónde formarte?
El Máster Oficial en Imagen Pública, Gestión de Eventos y Protocolo de ENyD, con metodología online, persigue la formación del estudiante en el dominio de habilidades y capacidades que le permitan llevar a cabo una adecuada proyección pública de empresas, personas e instituciones.
El alumno podrá adquirir el conocimiento integral de los instrumentos más eficaces para la definición y perfeccionamiento de las identidades, la visibilidad organizacional, la dirección de eventos y la gestión del protocolo.
Este máster, de manera novedosa, incorpora a su plan de estudios un módulo específico de Desarrollo de Marca e Imagen Pública. No solo el alumno aprenderá a proyectar la identidad de marca de una organización y/o empresa, sino que será capaz de asesorar a terceros para el desarrollo de su imagen pública.
Al finalizar los estudios, cada estudiante estará dotado de competencias profesionales en función de ocupar diferentes posiciones de relevancia en el mercado laboral. Si ya te encuentras trabajando en el sector, estarás preparado para afrontar nuevos retos profesionales si es lo que deseas.
Al ser un máster oficial, las prácticas empresariales están garantizadas. El Proyecto Final de Máster, se trata de un proyecto a través del cual tendrás que analizar y plantear acciones sobre un caso de estudio real poniendo en práctica la teoría aprendida.
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