La gestión de activos inmobiliarios se ocupa de la tasación, adquisición, desarrollo, comercialización o gestión de una propiedad. Esta incluye una amplia categoría de propiedad comercial como oficinas, hoteles, tiendas, o puede referirse a la gestión de una propiedad residencial.
Una carrera en gestión de activos inmobiliarios ofrece muchas oportunidades para aquellos interesados en el sector. Hay oportunidades de trabajo a largo plazo disponibles para personas apasionadas, motivadas y orientadas a objetivos.
Un gestor de activos inmobiliarios lidera el equipo para un cliente privado. Trabajan de manera directa con el propietario para planificar y ejecutar la gestión general de la propiedad y el servicio. Este profesional supervisa una gran propiedad y múltiples propiedades.
Como gestor de activos inmobiliarios, estarás a cargo del personal empleado en las propiedades, supervisando la contratación, capacitación y administración. Representarás a tus clientes en asuntos relacionados con el manejo del patrimonio y te comunicarás con contadores, asesores financieros, contratistas, abogados, etc.
Requisitos educativos para una carrera en gestión de activos inmobiliarios
Para seguir una carrera en gestión de activos inmobiliarios, debes comenzar por obtener un máster relacionado en instituciones acreditadas como el Instituto Europeo de Asesoría Fiscal (IENAF).
En este sentido, el Máster en Asesoría Jurídica y Fiscal en Activos Inmobiliarios de INEAF, en modalidad online y con prácticas garantizadas, te permitirá desarrollar un perfil profesional de forma completa a través de conocimientos actualizados y un claustro docente experto.
A día de hoy, la gestión de activos inmobiliarios es una de las funciones más relevantes en el mercado. En este escenario, las empresas del sector adquieren más protagonismo y es por eso que una formación especializada en el sector como el Máster en Asesoría Jurídica y Fiscal en Activos Inmobiliarios de INEAF posibilitará tu desarrollo profesional exitoso.
Este programa de estudios te prepará con los conocimientos jurídicos y fiscales imprescindibles para llevar a cabo el asesoramiento integral en lo que se refiere a tributación de las diferentes operaciones inmobiliarias y para conocer el marco normativo que regula las transacciones que ocurran.
Durante tu formación, aprenderás sobre derecho urbanístico, intermediación inmobiliaria arrendamientos, administración de fincas, gestión de comunidades de propietarios, fiscalidad en las operaciones inmobiliarias, impuesto sobre el patrimonio, haciendas locales y contabilidad para inmobiliarias y empresas de la construcción.
Un título en gestión de activos inmobiliarios como el de INEAF ofrece la posibilidad de abrir las puertas a varias carreras emocionantes en el campo como agente inmobiliario, gestor de instalaciones, gestor de propiedades, gestor de activos, analista o gestor de carteras o tasador.
Habilidades requeridas
A continuación, mencionamos algunas de las habilidades en gestión de activos inmobiliarios requeridas y que desarrollarás a través de tu formación:
Comunicación: como administrador de fincas, debes tener sólidas habilidades de comunicación oral y escrita. Estarás a cargo del enlace entre los propietarios y el personal, los inquilinos, los contratistas, etc. Los casos de falta de comunicación pueden causar pérdidas en los ingresos, la productividad, etc.
Organización: tu trabajo como administrador de fincas requerirá que tengas las habilidades organizativas necesarias. Como profesional, participarás en múltiples proyectos. Estos podrían ser arrendar una unidad, renovar los arrendamientos de otra y administrar los procedimientos de desalojo para otras Para estar al tanto de todos estos detalles, debes tener habilidades organizativas excepcionales.
Habilidades interpersonales: como administrador de fincas, debes poder trabajar con otras personas. Esto puede ser a través de la negociación, como tratar con inquilinos sin escrúpulos, o mediante la mediación a través de la formulación de un contrato que convenga a ambas partes. Tener buenas habilidades interpersonales genera confianza y puede conducir a relaciones duraderas.
Resolución de problemas: los administradores inmobiliarios a menudo son puestos a cargo de las propiedades por clientes ausentes. Esto significa que tendrás que tomar decisiones por tu cuenta y encontrar formas económicas y creativas de manejar y resolver problemas que sean aceptables para tu cliente.
Liderazgo: para operar de manera efectiva y aportar valor a tu cliente, deberás trabajar con un equipo para administrar la propiedad o propiedades de manera óptima. También necesitarás dotes de liderazgo para saber gestionar personas y relaciones. De esa manera, se puede lograr un objetivo común.
Adaptabilidad: un buen gestor de activos inmobiliarios debe aprender a evolucionar con el mercado. Debe poder adaptarse a las demandas de las tendencias en constante cambio para realizar sus funciones de manera efectiva.
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