La carga de trabajo de un gerente en entidades deportivas implica aplicar los principios de los negocios al apasionante mundo del deporte profesional. Cualquier fanático de los deportes informado puede atestiguar la importancia de las decisiones comerciales inteligentes cuando se trata de la trayectoria de un equipo.
Un gerente deportivo desempeña un papel vital en atraer apoyo, supervisar las actividades de los atletas y ganar el dinero que se necesita para asegurar el éxito continuo de un equipo. Los gerentes en entidades deportivas son responsables de garantizar que los atletas tengan los recursos necesarios para entrenar de manera efectiva.
En este rol, un gerente en entidades deportivas trabajaría junto a entrenadores y reclutadores para encontrar y nutrir nuevos talentos. Muchos deberes de los gerentes deportivos se incluyen en la categoría de recursos humanos: contratación, despido y negociación de contratos, por ejemplo.
Cada organización deportiva tiene un presupuesto y el gerente en entidades deportivas es responsable de garantizar que se use de manera constructiva y responsable. Como gerente deportivo, se espera que traigas dinero a través de negocios lucrativos y lo gastes en el éxito del equipo.
Debido a que los gerentes deportivos tienen un rol tan importante, a menudo se les considera una de las caras públicas de la organización. Por ello, se espera que participen en conferencias de prensa e interactúen con los medios a través de entrevistas.
¿Cuáles son las principales funciones de un gerente en entidades deportivas?
Las actividades del día a día de un gerente en entidades deportivas varían según la organización y su tamaño. En una organización pequeña, los directores deportivos hacen un poco, o quizás mucho, de todo. Al manejar los aspectos comerciales de los deportes, los gerentes deportivos elaboran presupuestos, encuentran ingresos, pagan facturas y contratan y administran personal.
Los gerentes deportivos pueden tener que contratar personal para hacer anuncios, tomar boletos, manejar el marcador y coordinar las otras tareas requeridas para jugar un juego.
Los gerentes en entidades deportivas también se encargan de la publicidad y el marketing que ayudan a que los fanáticos acudan al juego.
En algunos deportes y mercados, un gerente deportivo organiza actividades para mantener la participación de los fanáticos durante los tiempos muertos, por ejemplo.
Para generar ingresos más allá de la venta de entradas, los directores deportivos buscan patrocinios y anunciantes. Dichas oportunidades van desde que una empresa local compre un anuncio en un programa de fútbol de una escuela secundaria hasta poseer los derechos de denominación de un estadio profesional.
Habilidades fundamentales de los gerentes deportivos
Un gerente deportivo eficaz posee una serie de habilidades. Los gerentes en entidades deportivas deben ser organizados, detallados, analíticos, buenos comunicadores, hábiles con los números y los presupuestos, y negociadores inteligentes, además de tener un buen ojo para el talento en el campo y en la oficina.
Si bien los gerentes deportivos despliegan una serie de habilidades en sus funciones, varias capacidades se destacan como fundamentales:
Análisis de los datos. En algunos deportes, cada movimiento de cada atleta es capturado y analizado. Ser capaz de revisar los datos y sacar conclusiones válidas permite a los gerentes deportivos utilizar de manera efectiva el personal y el presupuesto del equipo.
Toma de decisiones. Los gerentes deportivos deben tener la capacidad de tomar decisiones que beneficien a la organización, incluso si eso significa eliminar a un jugador popular y enojar a los fanáticos. Si bien las decisiones de personal pueden ser las más visibles, los gerentes deportivos toman decisiones todos los días que afectan al equipo, la organización y los aficionados.
Contabilidad y presupuesto. Todos los equipos y organizaciones deportivas funcionan con dinero, ya sea un equipo de fútbol profesional que genera millones de euros en ventas de boletos e ingresos por televisión o un centro de recreación del vecindario que depende del dinero de los impuestos y los voluntarios. Asegurarse de que cada céntimo se gaste de manera efectiva, ya sea en alimentación o en jugadores, ayuda al equipo a hacer el mejor uso de sus recursos.
Negociación. Quizás la habilidad de gestión deportiva que más se muestra es la negociación con los jugadores, especialmente en las franquicias profesionales. Los gerentes en entidades deportivas no quieren pagarles a los atletas más de lo que necesitan, pero tampoco quieren alienar a los jugadores con retórica negativa u ofertas bajas. La comunicación y la comprensión de las necesidades de los jugadores son fundamentales para llegar a un acuerdo equitativo.
Los gerentes deportivos negocian con otras personas, y se requieren las mismas habilidades para obtener el mejor trato en equipos, uniformes, patrocinios y otras transacciones.
Innovación. Los equipos siempre están buscando una ventaja que les permita avanzar. El uso de análisis para evaluar a los jugadores revolucionó la forma en que se valoraba a los propios jugadores.
Los equipos que saltaron a la analítica temprano cosecharon campeonatos y mejoraron el rendimiento financiero. Encontrar y utilizar nuevas formas de entrenar a los jugadores puede proporcionar una ventaja a un equipo.
Algunos equipos emplean la realidad virtual para brindarles a los jugadores experiencia en el campo, mientras que las nuevas prácticas de dieta y psicología ayudan a los jugadores en cuerpo y mente.
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