Ahora es el momento perfecto para evaluar tus habilidades de dirección de equipos de trabajo, mientras continúas preparándote para los retos del próximo año. Esto es particularmente importante, ya que dejamos atrás un año en el que nuestras habilidades comerciales y de gestión se expandieron como en ningún otro.
Tras una pandemia, podemos comenzar a volver a la normalidad en poco tiempo. Sin embargo, este escenario ha expuesto enormes debilidades en la gestión de equipos.
En esta publicación, conversamos sobre la importancia de la dirección de equipos de trabajo en las empresas y cuáles son algunas de las principales técnicas para mejorarla.
Importancia de la gestión de equipos de trabajo
El principio de trabajar junto con tu equipo debe sustentar tu forma de operar. Dirigir personas no significa simplemente actuar como supervisor, para asegurar que hagan su trabajo satisfactoriamente. Significa involucrar a las personas de todo el equipo en un papel creativo, para garantizar que todos juntos puedan tener éxito.
Involucrar a las personas en temas amplios es motivador. Nunca subestimes a los integrantes del equipo Sus puntos de vista pueden mejorarlo todo: métodos, estándares, procesos y efectividad general.
Recuerda, a los directivos no se les paga por tener todas las ideas necesarias para que su equipo funcione bien en un mundo cambiante, sino por asegurarse de que haya suficientes ideas para que las cosas funcionen y sigan funcionando.
Nadie ni ninguna organización funciona bien sin una excelente dirección de equipos y objetivos claros. La responsabilidad de establecer muchos de ellos bien puede ser la de un director de equipos de trabajo.
Los objetivos sólo serán claros si son SMART (en español específicos, medibles, alcanzables, relevantes y a tiempo):
- Específicos para que se entiendan claramente y no haya posibilidad de malentendidos.
- Medibles para que todos sepan si se han cumplido o no.
- Alcanzables porque si son simplemente un pastel en el cielo, serán ignorados y tú, y cualquier proceso futuro de establecimiento de objetivos, perderán credibilidad.
- Realistas en el sentido de que deben encajar lógicamente dentro del panorama general y ser una forma deseable de proceder.
- Programados en un tiempo claro.
Los objetivos que establezcas deben condicionar y dirigir lo que hace tu equipo. Asegúrate de que todos tengan objetivos claros y que estén comprometidos a alcanzarlos.
Técnicas para mejorar la dirección de equipos de trabajo
1 Delegación para la buena gestión de equipos
Como directivo, debes liderar. Sin embargo, es importante tener una estructura de personal que permita la delegación y la confianza. Si al personal se le otorgan responsabilidades y autonomía, esto alivia la carga de trabajo de un gerente. Pero, igual de importante, también fomenta una cultura de autonomía.
Si los empleados no sienten que se están desarrollando en sus trabajos, es probable que haya una mayor rotación de personal. Esto le cuesta más a la empresa y hace que el equipo esté más fragmentado y sea menos eficiente.
2 Empatía
Muchos directores de equipos subestiman el poder de la empatía, de hecho, muchos no ven el valor en absoluto en esta habilidad de gestión de equipos de trabajo.
La empatía es crucial en tiempos de crisis cuando tantas personas están luchando y ha sido la gracia salvadora para muchas empresas durante la pandemia.
Hacer esto bien crea conexiones con tu personal, crea una fuerza laboral innovadora y leal.
¿Cómo muestras empatía?
Escucha a la gente, sin interrumpir. Y mientras escuchas, presta atención, sin distracciones como mirar tu teléfono o tu reloj.
Habla con la gente: mantente genuinamente interesado, pregúntales sobre sus intereses, presta atención a lo que están haciendo y elógialos por lo que están haciendo bien, y anímalos a hablar con sus propias ideas.
No solo creas una fuerza de trabajo más sólida, sino que mejoras el rendimiento comercial general.
3 Proporciona comentarios de valor a tu equipo
Es imperativo que los directores de equipo adapten su estilo de gestión para adecuarse a la fuerza laboral.
Los millennials de la Generación Y (de 24 a 38 años) prefieren recibir el reconocimiento en el acto. También anhelan el reconocimiento, la progresión profesional y quieren aprender y desarrollarse.
Sin embargo, independientemente de la demografía de la fuerza laboral, el desempeño exitoso de tu equipo se logra al tener claras las expectativas de cada miembro del equipo, brindando retroalimentación periódica sobre el desempeño y responsabilizando al personal por su propio desempeño mediante el establecimiento de objetivos.
4 Comunícate con tu equipo
Los jefes de equipo deben tratar de crear un sentido de paridad. En lugar de estar distante en una oficina, un gerente de equipo debe realizar reuniones de equipo periódicas.
Estas reuniones son una oportunidad para actualizar al personal sobre los cambios dentro de la organización. También permiten escuchar las opiniones y experiencias del personal y dar la bienvenida a los nuevos miembros del equipo.
Las reuniones de equipo también permiten que un director desarrolle sus habilidades de escucha activa. Un gerente no debe asumir porque lidera, o tiene muchos años de experiencia, que siempre sabe lo que es mejor. Es posible que se sorprendan gratamente y que la empresa se beneficie de las habilidades, la experiencia y los aportes del personal más nuevo y más joven.
Con mucho personal trabajando de forma remota, esto trae sus propios desafíos, pero también hace que la comunicación regular sea más importante ahora que nunca. La comunicación con equipos remotos garantizará que la fuerza laboral se mantenga conectada y actualizada con lo que sucede dentro del negocio.
5 Maneja la disciplina de manera justa
Un gerente debe seguir estrictamente las mejores prácticas. Los directores de equipo deben ser conscientes de que un enfoque único para todos, sin embargo, podría ser discriminación.
Un paso práctico a tomar es garantizar que se implementen políticas en relación con la disciplina y la igualdad. La gerencia debe asegurarse de que se sigan en toda la empresa y se modifiquen con el tiempo.
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